El ataque británico a las posiciones argentinas en la isla
Borbón (Pebble Island) tuvo lugar durante la Guerra de las Malvinas los días 14
y 15 de mayo de 1982. La isla Borbón se halla frente a la costa norte de la
isla Gran Malvina y es la mayor del archipiélago de las Malvinas, en ella las
fuerzas argentinas habían instalado la Estación Aeronaval Calderón.
La Estación Aeronaval Calderón
La Estación Aeronaval Calderón
El 23 de abril de 1982 en un helicóptero Puma de la
Prefectura Naval Argentina llegó el primer grupo de efectivos argentinos que
darían origen a la misma como punto de apoyo aeronaval, a la vez de servir de
lugar de observación de la zona norte de Malvinas.
Se aprovecharon las Instalaciones de una estancia ubicada en
el lugar para montarla, contaba con tres pistas de turba, libres de obstáculos,
en la cuales operarían aviones y helicópteros argentinos. Entre ellos T-34C
Mentor de los cuales fueron destacados cuatro, una división, en forma casi
inmediata.
Para su alistamiento se aprovecharía la doctrina,
experiencia y equipo con que el Grupo Aeronaval Insular montaba aeródromos de
campaña en la Isla Grande de Tierra del Fuego desde hacía cuatro años.
La población local isleña era de veinticinco personas,
incluyendo niños, a las cuales se les permitió seguir con sus actividades
normales, en la manera que no afectaran las operaciones militares. De hecho
convivieron durante cerca de dos meses con los efectivos argentinos en
situaciones de combate sin que se generaran inconvenientes de ningún tipo en un
marco de mutuo respeto.
En el casco de le Estancia se instaló la Central de Operaciones
de Combate, y una Compañía de Infantería de Marina del Batallón de Infantería
de Marina Número 3, a cargo del entonces Teniente de Navio Dn. Ricardo
Marega que se hizo cargo de la defensa terrestre.
A la vez que el entonces teniente de Navío José Maria
Pereyra Dozo era el responsable de las operaciones aéreas navales, y más
antiguo Comandante de la Plaza Militar, con dependencia del Comando Naval
Malvinas.
Duante la guerra de las Malvinas, sobre dos pistas
preexistentes en Puerto Calderón de la isla Borbón, la Armada Argentina instaló
el "Aeródromo Auxiliar Calderón", con la intención inicial de que
sirviera de base para aviones Beechcraft T-34 Mentor C-1, asignándole la Cia. "H"
del Batallón de Infantería de Marina N°3 para su defensa. Fue también utilizado
por la Fuerza Aérea Argentina como aeródromo de emergencia; a partir del ataque
que la BAM Cóndor de Puerto Darwin sufrió el 1º de mayo, se desplegaron en la
isla Borbón varios I.A. 58 Pucará originarios de esta base.
La isla adquiere cierta fama luego del 1ero de mayo, cuando
el primer teniente Carlos Perona se eyecta sobre la isla luego del combate
aéreo a bordo de un Mirage III.
Ataque británico
El día 14 de Mayo se realizaron trabajos de mantenimiento de
la pista, a pesar de que comenzó a llover nuevamente.
Durante la noche del 14 al 15 se produjo el desembarco en la
isla de 45 hombres del Escuadrón D del S.A.S (*) bajo las órdenes del mayor Cedric
Delves, junto con el capitán Christopher
Brown y su equipo de apoyo de fuego, de la Batería 148, Comando 29 de
Fusileros, utilizando dos helicópteros Sea King del Escuadrón 846 y botes.
A las 0400 hs. se recibió el primer ataque inglés. Todo
comenzó con disparos de artillería desde un buque (HMS Glamorgan que tiraba a
las proximidades de la pista; luego se detectó la presencia de tropas en tierra
avanzando hacia aquélla.
Dos helicópteros Westland Sea King HC.Mk.4 del 846 Naval Air
Squadron, parte de Commando Helicopter Force, salieron con 45 miembros de la
Escuadrón "D" a bordo. El punto de descenso estaba aunos 6 km de la
pista de aterrizaje en la isla Borbón. Encargaron a la tropa de montaña la
destrucción de los aviones argentinos, mientras que el personal restante
actuaba como fuerza de protección, asegurando la aproximación a la pista de
aterrizaje, y formando una reserva operacional. El grupo de ataque descargó más
de 100 bombas del mortero de L16 81 mm, cargas explosivas, y armas antitanques
Rocket 66mm HEAT L1A1 Light para llevar a la zona de combate desde los
helicópteros, cada hombre del grupo de ataque llevaba por lo menos dos bombas
de mortero. Las armas ligeras que se usaron fueron los fusiles M 16 y algunos
con los lanzagranadas colgantes M203.
La oscuridad reinante hacía imposible para el personal de
Infantería de Marina poder determinar los movimientos del enemigo; en cambio
éstos tenían muy claro el movimiento de los nuestros, mediante el uso de
visores nocturnos.
La navegación del acercamiento fue conducida por un miembro
de la Boat Troop que había realizado el reconocimiento.
Cuando el grupo de ataque se acercó al blanco, apuntaron a
un centinela argentino, no obstante no fueron comprometidos, permitiendo llegar
al blanco y poner cargas explosivas en siete de los aviones. Una vez que todos
los aviones habían sido preparados, el equipo de ataque abrió fuego con las
armas ligeras y los cohetes L1A1 que castigaron los aviones. Todos los aviones
fueron dañados, destruyendo a algunos sus trenes de aterrizaje. Después de esa
señal el HMS Glamorgan comenzó a bombardear las posiciones argentinas
adyacentes al campo de aviación, golpeando los almacenes de municiones y de
combustible.
Las tropas argentinas eran un reducido número de Infantes de
Marina (en su mayoría conscriptos) del BIM3 cuya misión principal era evitar
que los británicos tomen el aerodromo. Los infantes de marina permanecían
ocultos en abrigos durante el ataque del HMS Glamorgan.
Los británicos dejaron cargas explosivas en 7 aviones, luego
de detonar las cargas abrieron fuego automático con sus rifles y los cohetes
M-72 sobre los aviones, dejando fuera de combate a todos los aviones restantes.
El ataque resultó exitoso y muy rápido para las fuerzas
británicas dejando como resultado dañadas ,en mayor o menor grado, todas las
aeronaves de la Armada, Fuerza Aérea y Prefectura Naval.
En la creencia que la operación era un asalto completo, a la
base aérea. Rápidamente se puso en marcha el plan de defensa. Los infantes se
abocaron a la defensa de la pista y las aeronaves y todo el personal
aeronáutico al sector de alojamientos, central de operaciones y almacenes
empleados en el mantenimiento.
Los infantes de Marina tenían como consigna, antes de
entregar la guarnición, volar la pista para dejarla inoperativa. Para asegurar
la defensa de la base aérea, los Infantes de marina dejaron cargas explosivas
instaladas en variados sectores de la pista. Cuando comenzó el ataque,
británico, las fuerzas argentinas contestaron con fuego de fusil y accionaron
las cargas explosivas.
Las fuerzas argentinas accionaron las cargas. Dichas
detonaciones pudo haber dejado heridos entre las filas británicas (Una de esas
cargas hirió a un soldado británico (posiblemente matando a otro). Con la luz
del día se observó apósitos con sangre en el lugar. Afortunadamente para los
británicos la humedad de las islas impidió que el total de las cargas exploten,
ya que el grueso de las tropas británicas se encontraban en una zona donde los
explosivos argentinos no detonaron. Casi instantáneamente luego de esa explosión
cesó el fuego enemigo y los británicos se retiraron amparados en la oscuridad
de la noche; acarreando a un hombre herido, y posiblemente a un muerto, al
sitio de reembarque con el equipo de ataque que alcanzaba los aviones al tiempo
requerido para el transporte de nuevo al HMS Hermes (R12) antes del amanecer.
Las pérdidas
Argentina: seis IA-58 Pucará, cuatro T-34 Turbo Mentor y un
Skyvan de prefectura.
Como puede apreciarse las perdidas solo fueron materiales.
Como puede apreciarse las perdidas solo fueron materiales.
Inglaterra: sufrieron un herido y posiblemente un muerto.
(*) Uno de los oficiales británicos del SAS implicados en el
ataque, era el capitán Hamilton, quién fue muerto, más tarde, en otra acción del
SAS al enfrentarse a Comandos del Ejército Argentino, cerca de Puerto Howard.
Un pequeño detalle para apuntar: Uno de los dos helicópteros Seaking que desplegaron a los 45 hombres del Escuadrón "D" del Reg. 22 SAS para realizar el ataque, durante el viaje de vuelta al PA chocó a una bandada de avutardas, que se le metieron en las turbinas, estas se plantaron y cayo como una piedra al agua con toda la gente arriba. Resultado: 22 muertos.
ResponderBorrarinteresante
BorrarOtro detalle a corregir: el dispositivo de seguridad, a cargo de los infantes de Marina, no era la compañía H completa, la misma fue diezmada antes de salir del continente, llendo sólo una sección de la misma, sin llevar sus armas de apoyo (morteros, lanzacohetes,etc) así mismo, esos infantes, fueron dejados s su suerte, ya que nunca se los brindó apoyo ni mucho menos se cumplieron con los requerimientos que se efectuaban, para poder cumplir la misión. El día 11 de junio, se modificó el dispositivo de seguridad, ya q por las inclemencias climatización, ser inundaban las posiciones.... Este hecho, aunque fortuito, impidió bajas en la propia tropa. Un último dato: las minas, no solo NO explotaron por la humedad, sino que en varios tramos, se encontró el cordón detonante cortado. Cuando se recompuso el dispositivo, se instaló con un doble circuito para mayor seguridad.
ResponderBorrarNos durmieron mal.
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